Cada vez es más frecuente ver en la consulta mujeres con problemas de pérdida de pelo. No se debe a que ahora la alopecia sea más frecuente que antes, sino a que con los nuevos tiempos, la estética, el aspecto externo, es más importante que antaño.

Las alopecias pueden ser cicatriciales o no cicatriciales. Ahora me voy a referir sólo a las no cicatriciales que son las más frecuentes.

La paciente con problemas de cabello puede presentar dos síntomas:

1) que el pelo es fino y que empieza a verse «clareas» o se le ve el casco (el cuero cabelludo) cuando se mira en el espejo

2) que el pelo se le cae en exceso pero no sin presentar «clareas».

Esta distinción es de gran importancia, porque en el primer caso nos encontramos muy posiblemente con una alopecia androgenética femenina, de posible origen genético, mientras en el segundo caso nos encontramos ante las caídas bruscas pero transitorias de los efluvios telógenos, que son las típicas caídas de cabello por estrés o la que ocurre tras un parto.

Puestos a elegir es preferible tener un efluvio telógeno que una alopecia androgenética, porque el efluvio suele recuperarse espontáneamente o con tratamiento apropiado, mientras que la alopecia androgenética suele ser lenta pero progresiva, es decir para toda la vida.

Es recomendable siempre ante toda paciente con exceso de caída de cabello conocer en la analítica los niveles de hierro y ferritina, así como las hormonas tiroideas que pueden empeorar o provocar pérdidas de cabello. En las alopecias androgenética también se suele estudiar el nivel de hormonas androgénicas como las testosterona y el DHEA.

En cuanto al tratamiento, las alopecias androgenéticas se tratan con minoxidil tópico que es una solución de aplicación local que estimula el crecimiento del cuero cabelludo al mantener el foliculo piloso durante más tiempo en la fase de anágeno o fase de crecimiento. Este tratamiento debe ser aplicado el mayor tiempo posible, durante años. Además del minoxidil tópico existen medicamentos antiandrógenos como el acetato de ciproterona (diane, androcur, yasminelle), espironolactona (aldactone) o flutamida. La eficacia de estos tratamientos es similar y hay que valorar cada caso por separado para recomendar el tratamiento más apropiado para cada paciente.

Por ultimo el trasplante de cabello en la alopecia androgenetica en la mujer se emplea cada vez más para repoblar zonas donde se han perdido los folículos, pero siempre asociado al tratamiento médico y tópico. Los trasplantes hoy día son técnicas cada vez menos invasivas y con resultados muy buenos. Podeis mirar en mi pagina www.clinicadelpelo.com fotos, indicaciones y cómo se hace este procedimiento quirúrgico.

No debemos de olvidarnos de los cosméticos, como el Toppik o el Nanogen, que son productos cosméticos basados en fibras de queratina que se aplican sobre el pelo seco y que tapan las clareas. Esto es muy útil porque a nadie nos gusta que la gente con la que hablamos te esté mirando las clareas o te diga algún comentario inapropiado al respecto. Estos cosméticos son formidables porque al menos solucionan, si bien de forma ficticia, pero eficaz este problema.